¿Son compatibles ambos términos? ¿Por qué tenemos la impresión de que los altos ejecutivos, empresarios, millonarios y grandes empresas viven dando la espalda al crecimiento del ser humano, no teniendo entre sus prioridades el bienestar de sus congéneres, mas el crecimiento de sus cuentas de resultados, fortunas o retribuciones salariales? La ciencia moderna está dando respuesta a estas y otras cuestiones similares. Hoy en día la información que día a día vamos conociendo por medio de los físicos y científicos más importantes del siglo XX y XXI nos demuestra que vivimos dentro de una gran ignorancia. No es objeto del presente artículo entrar en los descubrimientos que la ciencia está revelando a la sociedad, que nos parecen más ciencia ficción que ciencia, y de los que abordaremos en futuros artículos, pero déjenme esbozar unas simples pinceladas: ¿qué porcentaje del cerebro usamos normalmente? ¿de cuánta información somos conscientes?
Aproximadamente, un 10% del mismo, y no más de un 5% de la información. Es decir, podemos creer que el 100% de lo que hacemos es porque queremos. No es así. El subconsciente manda en nuestras vidas un 95% del tiempo. Parece claro que me estoy perdiendo casi la película entera de la vida, de lo que está sucediendo, de quiénes somos y de por qué actuamos como lo hacemos. Nos resulta muy difícil vivir alejados del mundo que “vemos” y que creemos “conscientemente” existe, y por ello, sin querer participamos como individuos en el ejército de sociedad materialista que conforma el mundo que llamamos desarrollado. Y no “materialista” como término derivado de bienes materiales, sino como derivación de la materia, frente a su dualidad, el espíritu. Por aquí podríamos tener un primer acercamiento a la respuesta de la pregunta inicial. ¿Qué mejor ejemplo de apego a la materia que las posesiones materiales que consideramos, razonablemente, tan importantes? ¿O es que ninguno queremos el mejor colegio posible para nuestros hijos, el mejor trabajo, el mejor bienestar material posible sin caer en la avaricia y derroche, la mayor salud posible, etc? No es de extrañar, poniendo como ejemplo España, que más de 6 millones de personas tengan depresión, que uno de cada 3 españoles haya consumido ansiolíticos en el último año, o que España esté teniendo el nivel más alto de estrés de Europa, donde un 74% de los españoles manifiesta preocupación por su economía. Por ello Dinero y Conciencia/Espiritualidad no casan, nos rechina (perdonen la generalización, que todos sabemos es siempre injusta).
Nuestro Inconsciente colectivo puede tener información grabada de que Gente Rica cuasi equivale a Gente menos humana, con menos valores de Amor. ¿Es verdad? Particularmente creo que no. No obstante, en mi personal trayectoria profesional, sí puedo constatar que el mundo de los negocios y el mundo de las finanzas, son un mundo de “lucha”. Qué difícil es hacer un negocio sin contratos, sin abogados, sin pensar en todas las posibilidades negativas que la contraparte me puede hacer, sin analizar cómo quitarle a la competencia, cómo vender más creando continuas nuevas necesidades al consumidor, cómo pagar los menos impuestos posibles, cómo ser eficientes, tener los mejores empleados para la empresa, cómo crecer año a año, cómo ganar más dinero, etc. ¿Es una lucha constante? ¿Y me habla usted de Espiritualidad y Conciencia en este mundo de los negocios? La respuesta es SÍ, y es una enorme alegría. Afortunadamente, se pueden hacer negocios con conciencia, se puede generar riqueza material y a la vez riqueza espiritual.
Personalmente siempre digo que el planeta Tierra, con Oriente y Occidente como polos opuestos, se unen hoy en día como el símbolo del Infinito. ¿En qué sentido? En pleno 2016, vemos cómo cada vez más en España, Europa, EEUU y el mundo occidental desarrollado buscamos técnicas espirituales orientales, cada día practicamos más yoga, se enseña Mindfluness en los colegios (sí, hasta en España), buscamos libros de crecimiento personal, leemos sobre física cuántica, escuchamos gurús del New Age, nos preguntamos sobre cuestiones metafísicas y filosóficas que hace 25 años, no más, sonaban a propagandista bajo efectos de sustancias psicotrópicas. Es decir, Occidente llama a la puerta de Oriente. Y ¿qué hace Oriente? Cerrar el símbolo del Infinito viniendo a comprar, nunca mejor dicho, nuestros valores materiales occidentales. Y así tenemos al Imperio Chino, Indio, y demás asiáticos como los nuevos grandes consumidores del mundo, allá donde las finanzas corren firmes para no perderse la fiesta. Ya en Estados Unidos fundamentalmente, pero también en UK y otros países, se han creado asociaciones que recogen a Empresas y Empresarios “CONSCIENTES”. Hay una incipiente, pero muy importante corriente en estos países, que está provocando un Cambio de Paradigma en la forma de hacer negocios, en la forma de manejar las Finanzas. Ya no importa sólo la última línea de la Cuenta de Resultados, también importan la felicidad de los trabajadores, la calidad del producto, el trato a los clientes y proveedores, y el cuidado del Medio Ambiente. Y curiosamente, sus negocios crecen, aunque gasten más en empleados, en bienestar dentro de las empresas. ¿Por qué? Una vez más, la ciencia también nos está dando las respuestas.
Todo ser humano busca en su vida una única cosa: ser FELIZ. Y la ciencia está demostrando porqué un entorno consciente nos hace felices, y nos hace por ende, mejores y más eficientes empleados, ejecutivos y empresarios, mejores personas, mejores miembros de nuestras familias, mejores amigos, y en el caso de los negocios, mejores y más asiduos clientes, provocando más crecimiento de negocio para la empresa y con mejores márgenes de rentabilidad. Hay muchos ejemplos de empresas y empresarios conscientes, aunque sigan siendo una minoría en el macro escenario de las finanzas mundiales: TipTree, TradeMark, WholeFoods, John Mackey, Andrew Thornton, Jon Freeman, etc. Estamos hablando de compañías líderes mundiales en sus sectores, con billones de facturación. Demos la bienvenida, de corazón, al Capitalismo Consciente. Es la vanguardia a nivel empresarial, cada día con más importancia. Desde aquí le invito a convertirse en una persona de negocios consciente. Participe con él y de él. Le aportará mayores recursos y mayor felicidad, a su empresa, y a su esencia de ser. Permítanme un último apunte: Las universidades y escuelas de Negocio más prestigiosas están recogiendo este testigo, y se está trabajando a marchas forzadas en nuevos modelos educativos para enseñar cómo hacer negocios de una forma más consciente. Todos sabemos que el curso de la Universidad más famosa del mundo, Harward University, que año tras año era el más solicitado por todos los alumnos de cualquiera de sus facultades, era el curso de la Felicidad impartido entonces por Tal Ben-Shahar.
Este pasado año 2015, en Barcelona, la prestigiosa escuela de negocios ESADE, desarrolló una convención internacional muy importante titulada “Spirituality in Management”, Espiritualidad en la Gestión y Dirección de Negocios y Empresas. Así es, el nuevo Paradigma Científico de nuestros días, tiene sus ramificaciones no sólo a nivel personal y de crecimiento del ser humano, sino a nivel colectivo y empresarial, transformando el mundo de las Finanzas y Negocios, donde el dinero seguirá siendo muy importante, pero ya no lo más importante, o lo único importante. La empresa y las finanzas serán una herramienta más de nuestra evolución en el desarrollo de Consciencia, y no un mero fin para la consecución de bienes materiales.
Artículo escrito por Iñaki Gil • Consultor y coach para personas y empresas
Publicado en el nº 9 de la revista Ideas Imprescindibles