Plastic Attack: ¿Plásticos? No, gracias

La producción de plástico en el mundo se ha disparado en los últimos 50 años. Sólo entre 2002 y 2013 aumentó un 50%, pasando de 204 millones de toneladas en 2002 a 299 millones de toneladas en 2013. Y según estudios realizados por Greenpeace, en el año 2020 la producción de plástico alcanzará los 500 millones de toneladas anuales, lo que significará un 900% más que en el año 1980. Si una simple bolsa de plástico tarda en biodegradarse entre cinco y 950 años, y la mayoría acaban en el mar, el panorama para el futuro del planeta es desolador. 

Muere una ballena en Tailandia después de ingerir 80 toneladas de plástico

 

Ante estas dramáticas expectativas cada vez son más las voces en todo el mundo que exigen medidas urgentes para frenar el consumo desmedido de plástico. Con esta misión ha nacido el movimiento “Plastic Attack”, una iniciativa cuyo objetivo es la reducción del plástico en el envasado de productos. Sus simpatizantes, a la salida de los supermercados, arrancan los envases innecesarios de los productos que acaban de comprar y los amontonan en carros. De esa forma escenifican su protesta y responsabilizan a los supermercados del uso abusivo de plástico. En los últimos meses hemos visto acciones de estos activistas en ciudades de Francia, Bélgica o Reino Unido, y en España, ya se han registrado varios ataques en Madrid, Euskadi y Cataluña.

Keynsham (Inglaterra), el primer Plastic Attack en el mundo

 

El 27 de marzo de 2018 la BBC se hizo eco del primer plastic attack 

El primer “plastic attack” del que se tiene noticia sucedió el 26 de marzo de 2018 en Keynsham, una ciudad del sur de Inglaterra, situada entre Bath y Bristol. Ese día un grupo de unos 25 clientes de un supermercado de la cadena Tesco se pusieron de acuerdo para retirar los envoltorios de los productos que acababan de comprar y los depositaron en cajas, que se fueron amontonando en la puerta del supermercado. El impulsor de la protesta se llamaba Tony Mitchell y transmitió su protesta al gerente del supermercado, que aseguró que iba a trasladársela a sus superiores. Días después, altos responsables de Tesco declararon que iban a reducir el uso de envases de plástico en sus supermercados, y que se comprometieron a convertir todos sus envases en reciclables para el año 2025.

Plastic Attack en Amsterdam

El movimiento Plastic Attack en España

A raíz del suceso de Keynsham, comenzaron a surgir nuevos “plastic attacks” en otras ciudades europeas. En España la asociación Nasti de Plastic abandera este movimiento. Este colectivo ubicado en la Sierra de Madrid incluye en su página web consejos, noticias y vídeos que ayudan a conocer la esencia de este movimiento. Sus integrantes alertan de la necesidad de tomar conciencia de cada plástico que llega a nuestros hogares y nos piden elegir productos mínimamente empaquetados, y si es posible, de origen local. Asimismo nos recomiendan que cuando hagamos la compra, rechacemos las bolsas y aprovechemos para comentar que estás en contra del uso de plástico y sugieren otras alternativas, como productos a granel, envasados biodegradables o retornables, y sistemas de devolución de envases. En la página de Nasti de Plastic puede leerse que todos los interesados en realizar un “plastic attack” deben procurar realizar acciones alegres y cívicas, sin violencia y con absoluto respeto a los empleados de los supermercados. También sugieren hacer fotos y grabar vídeos de sus ataques para compartirlos en las redes sociales e intentar crear una corriente expansiva que acabe frenando el uso desmedido de plástico en el mundo.

Plastic Attack en Oslo

El consumo de plástico en el mundo

Según Greenpeace, China es en la actualidad el mayor productor de plásticos del mundo, seguido de Europa, Norteamérica y el resto de Asia. Y en Europa, más de dos tercios de la demanda de plásticos se concentra en cinco países: Alemania (24,9%), Italia (14,3%), Francia (9,6%), Reino Unido (7,7%) y España (7,4%). 

Aunque existen muchos tipos de plásticos en el mercado mundial, hay siete grupos principales:

  • PET (Polietileno tereftalato) – Botellas de bebida, botellas de agua, envases de aceite
  • LDPE (Polietileno de baja densidad) – bolsas de supermercado, implementos de aseo
  • HDPE (Polietileno de alta densidad) – Envases de leche, detergentes, aceite para motor, contenedores de basura, botellas de detergente
  • PVC (Cloruro de polivinilo) – Tubos y cañerías, cables eléctricos, envases de detergentes, ventanas, válvulas   
  • PP (Polipropileno) – recipientes para yogures, sorbetes, tapones de botella.
  • PS (Poliestireno) tazas desechables, bandejas, bolsas.
  • Otros – generalmente indica que es una mezcla de varios tipos de plásticos – botellas de ketchup, platos para hornos de microondas

Recientemente la Unión Europea ha establecido como objetivo para los países miembros que los gobiernos garanticen que para finales de 2019 sus países no consuman más de 90 bolsas por persona y año. Y el objetivo es aún más ambicioso: para el año 2025 se han propuesto reducir esa cifra a 40 bolsas. 

En la actualidad, los países de la UE muestran cifras de consumo de bolsas de plástico muy dispares. Por ejemplo, en Irlanda el consumo se ha reducido a sólo 18 bolsas por persona y año, mientras que en Grecia la cifra asciende a 269 bolsas y en Bulgaria supera las 421 bolsas. En España el consumo es de 180 por persona y año. 

Plastic Attack en Viena