¿Para qué sirven los mitos?
Un mito es mucho más que una metáfora o una narración fantástica. Es un instrumento esencial para interpretar la realidad y para comprender los abismos más profundos de la existencia humana. En este artículo vamos a intentar conocer qué son los mitos y por qué son tan importantes para nuestra cultura.
Narciso. Pintura al óleo de Caravaggio
Los mitos son útiles para entender el mundo
El mito, como metáfora que perdura a lo largo del tiempo, es una figura narrativa que sigue muy viva en la cultura occidental. Los mitos están profundamente enraizados en nuestra sociedad y están muy presentes en nuestra vida diaria, a veces de una forma sorprendente e intensa.
La función de los mitos es proporcionarnos puntos de referencia para comprender la realidad que nos rodea. Además, los mitos nos brindan modelos de comportamiento que nos permiten dirigir nuestras vidas.
En una sociedad tan mercantilizada y utilitarista como la actual, la mitología puede parecer para muchos una disciplina inútil, pero nada más lejos de la realidad. Los mitos nos enseñan valores, como el respeto, la generosidad o la paciencia, y nos ofrecen retratos de lo que somos en realidad los seres humanos.
Dafne
Qué es y qué no es un mito
Un mito es una metáfora, un cuento, una narración fantástica. Un mito siempre presenta una historia que, pese no ser verdadera, sí aborda problemas y situaciones a los que nos enfrentamos con frecuencia los seres humanos. Un mito es siempre una alegoría que intenta transmitirnos unos valores y actitudes, y que nos guía a la hora de tomar decisiones que nos afectan profundamente.
Sin embargo, un mito no es una creencia falsa, no es una mentira, o dicho con un término muy de moda, no es un “fake”. En la actualidad está muy extendido el uso de la palabra “mito” utilizada como sinónimo de “mentira”. Tampoco hay que confundir los mitos con un deportista muy admirado, o con un actor que hizo historia con sus películas. La causa de esta distorsión semántica puede provenir de una traducción equivocada del inglés, pero también puede resultar de las asociación de los mitos con una visión supersticiosa de la realidad.
El mito es una narración muy compleja. No puede compararse con una fábula, que se trata de una narración de una gran sencillez. La complejidad es un rasgo distintivo de los mitos, que precisamente por esa complejidad, suelen ser interpretados de diversas maneras, son adaptados por culturas muy diferentes e incluso son revisados frecuentemente a lo largo de la Historia.
La complejidad de los mitos favorece la superposición de opciones que plantean dilemas que en muchas ocasiones llevan a la contradicción.
Pegaso
La mitología y la religión
La mitología a menudo bordea las fronteras de ciertas disciplinas como la religión o la filosofía. En concreto, la religión ha bebido en numerosas ocasiones de las fuentes de la mitología para construir relatos que combinan sucesos históricos con mitos para crear nuevas figuras narrativas que atraigan la atención de nuevos feligreses.
Por ejemplo, muchos expertos han encontrado similitudes entre la figura de Jesús y otras figuras religiosas o míticas, como Dioniso, Mitra, Horus, Krishna, Buda o Quetzalcóatl. En su influyente libro “El héroe de las mil caras”, el mitólogo estadounidense Joseph Campbell introdujo una teoría realmente impactante: detrás de las historias de Jesús, Krishna, Buda y otros héroes se encontraba un único mito. Años después, en un libro posterior titulado “Las máscaras de Dios: Mitología occidental”, Joseph Campbell llegó a escribir que “la conmovedora leyenda del Cristo crucificado y revivido se creó para añadir nueva calidez, inmediatez y humanidad a los viejos relatos que ya existían acerca de los dioses Tamuz, Adonis y Osiris”.
Adonis
Los mitos vienen del pasado y nos guían hacia el futuro
Cada mito ofrece un conjunto de ideas que explican lo que una determinada cultura o sociedad piensa sobre un tema complejo, como el origen de la vida, la muerte o la felicidad. A veces los mitos nos orientan hacia la solución de problemas, otras veces nos inspiran para crear obras de arte, y algunas veces nos facilitan la comprensión de ciertos comportamientos. Al transmitirse de generación en generación, los mitos se enriquecen con nuevas revisiones y se actualizan para adaptarse a nuevos problemas e inquietudes, dejando una huella que se proyecta en el tiempo. Ese legado constituye una herencia de un valor incalculable en cada momento histórico, ofreciendo un conocimiento que nos ayuda a conocer más sobre nuestro pasado, nos permite construir un presente más estable y nos conduce hacia un futuro más seguro y prometedor.
Medusa