Datos básicos de la España vaciada
La España vaciada, es decir, la despoblación de las zonas rurales, es un grave problema a los que se enfrenta nuestro país. Desde 1975 hasta 2021, la población española ha crecido en 13,1 millones. Sin embargo, no lo ha hecho de una forma uniforme y se han producido múltiples movimientos migratorios de las zonas rurales hacia los centros urbanos.
Para un niño que ha nacido en 2021 es importante que puedas explicarle el mundo que se va a encontrar. Además del cambio climático, la despoblación es otro problema real, que afecta especialmente en nuestro país. En este post analizaremos los principales datos de este éxodo que se ha producido en los últimos años.
Los principales datos que explican el abandono de las zonas rurales
Según el Instituto Nacional de Estadística, 22 millones de españoles residen en los 100 municipios más poblados de España. Esto significa que prácticamente el 50 % del total de la población se concentra en solo un 4 % de todo el territorio nacional. Castilla La Mancha, Castilla y León, Extremadura y Aragón son las principales comunidades autónomas donde se manifiesta con mayor intensidad esta situación.
El INE también indica, por ejemplo, cuáles son las ciudades que más habitantes han ganado y perdido en los últimos años. Villarmentero de Campos, situada en Palencia, ha perdido el 43,8 % de su censo recientemente. En términos absolutos, El Ejido (Almería) perdió más de 3.000 habitantes en el último año. En el otro lado de la balanza, Madrid suma habitantes a su censo de forma constante. Sin ir más lejos, solo en el último año, más de 40.000 personas se fueron a vivir a la capital de España. De hecho, también es una de las ciudades, junto a Barcelona, que encabeza el destino turístico de millones de extranjeros cada año.
Los jóvenes son los principales emigrantes a las grandes ciudades
Pero ¿cuál es el perfil de las personas que protagonizan este éxodo migratorio? El Padrón Continuo, que ofrece el INE, revela que son los jóvenes los que están abandonando los pueblos. La población rural, mucho más envejecida, parece expuesta a la desaparición. Los contrastes de edad son realmente visibles. Por ejemplo, en la provincia de Orense, un tercio de los habitantes tiene más de 65 años. En cambio, en Melilla una de cada cuatro personas tiene menos de 15 años.
Si lo comparas con el resto de Europa, España es el cuarto país en el ranking con el mayor riesgo de despoblación. Solo le superan Estonia, Finlandia y Letonia, países que pertenecen a la zona norte europea. Pero ¿qué se considera un municipio que se encuentra en riesgo de despoblación? Según Eurostat, es aquel que presenta un crecimiento negativo de población en los últimos años. Asimismo, el crecimiento vegetativo debe ser negativo, es decir, el número de fallecidos supera al número de nacidos. Además, la densidad de población debe ser inferior a 12,5 habitantes por kilómetro cuadrado. La eutrofización es otro de los contratiempos actuales, y que afecta sobre todo a las zonas rurales.
Las regiones más afectadas por la despoblación en España
Asturias y Castilla y León son, sin duda, dos de las comunidades autónomas más afectadas por la despoblación de las zonas rurales. Más del 85 % de sus municipios tenían en 2020 menos población que en 1996. Por detrás de estas, Extremadura y Aragón son otras regiones del país en las que la despoblación es un problema real. Según datos del INE, hasta 13 provincias perdieron habitantes a lo largo de las dos primeras décadas de siglo. Todos migraron hacia grandes centros urbanos.
En este período de tiempo, los municipios de 1.000 ó menos habitantes han registrado una caída hasta de un 8,9 %. En 2018 ya representaban solo el 3,1 % del total de municipios en España. Los principales destinos de los migrantes son Madrid y Barcelona, que han visto disparada su población debido a la inmigración. Sin embargo, las capitales de provincia también han experimentado un notable crecimiento de población.
La despoblación también ha supuesto una oportunidad para los extranjeros que buscan una nueva residencia. Han visto la oportunidad de encontrar la tranquilidad en estos pueblos españoles donde no habita tanta gente. De hecho, según el INE, en algunos municipios en 2020 ya vivían más extranjeros que ciudadanos nacionales. El ejemplo más claro lo puedes encontrar en el pueblo de Torre del Burgo (Guadalajara), donde el 90,7 % son personas de otros países. Le siguen Partaloa en Almería, o el pueblo de Rojales en Alicante.
Como conclusión, la radiografía de la España vaciada deja un país totalmente envejecido. 4 de cada 10 personas viven en municipios de más de 100.000 habitantes. Esto implica que de los 8.000 municipios que existen en España, en 5.000 viven menos de 1.000 personas. Esta situación tiene como consecuencia que a la España rural no lleguen las inversiones o que se pierdan una gran cantidad de infraestructuras. El mundo rural se encuentra ante un reto que nos afecta a todos y que debe ser entendido como una oportunidad.