Gaslighting, una forma de manipulación tan peligrosa como sutil

¿Alguna vez te han dicho que has perdido el juicio? ¿O que ya te estás poniendo melodramática? ¿Q que ya estás a la defensiva? Cuidado. Puedes estar siendo víctima de gaslighting, una técnica de manipulación muy sutil que empuja a la persona que lo sufre a dudar de su propia percepción de la realidad.

¿Qué es Gaslighting?

Gaslighting, un patrón de abuso psicológico que debe su nombre a Hollywood

El término “gaslighting” está relacionado con el nombre de una película estadounidense de 1944 titulada “Gaslight”. La película, que está basada en una popular obra de teatro, se estrenó en España con el título de “Luz que agoniza”, estaba dirigida por George Cukor y protagonizada por Charles Boyer, Ingrid Bergman y Joseph Cotten. En América Latina la película se tradujo como “Luz de gas”, una expresión que describe con mayor precisión la naturaleza del gaslighting.

En la película un hombre manipula a su mujer para que crea que está loca y así robar su fortuna. El marido manipulador esconde cuadros, joyas y otros objetos valiosos, haciendo crear a su esposa que ha sido ella la responsable. La mujer entra en un profundo estado de ansiedad y teme que su marido la vaya a abandonar.

Gaslighting” podría definirse como un patrón de abuso emocional donde el manipulador intenta que su víctima acabe dudando de su salud mental, memoria o percepción. Esa situación provoca que la víctima sienta ansiedad, estrés o depresión.

Gaslighting, la base de muchas relaciones tóxicas

Gaslighting, la base de muchas relaciones tóxicas

El gaslighting no es un comportamiento extremo o minoritario. Se trata de una estrategia de manipulación muy frecuente. Muchas personas la utilizan de forma consciente o inconsciente en sus relaciones. “Te lo estás inventando. Yo nunca te dije eso” o “Lo dije de broma. No tengo la culpa de que te tomes las cosas así” son expresiones que parecen inofensivas, pero que pueden esconder una gran dosis de intención. Si es así, el manipulador o manipuladora estará tratando de convencer a su víctima de que el problema está en su forma errónea de percibir la realidad.

El gaslighting es una forma tan sutil de manipulación que muchas personas no lo identifican y acaban creyendo, tras un camino a veces tortuoso, que realmente tienen un problema de salud mental.

El gaslighting es la base de muchas relaciones tóxicas, en las que la víctima se queda atrapada, presa de la inseguridad y de la confusión.

10 señales para detectar el gaslighting

10 señales para detectar el gaslighting

La psicóloga norteamericana Robin Stern, ha dedicado muchas horas de estudio al gaslighting. En su libro “The gaslighting effect”, expone 10 señales que nos ayudarán a desenmascarar a un manipulador o manipuladora. Si se te presentan sospechas, hazte estas preguntas


1.  ¿Te cuestionas tus ideas permanentemente?

2.  ¿Te preguntas muchas veces si eres demasiado sensible?

3.  ¿Te estás disculpando constantemente?

4.  ¿Te preguntas por qué no eres feliz, aunque a tu alrededor no parece faltarte de nada?

5.  ¿Estás siempre ofreciendo excusas a tus familiares o amigos por el comportamiento de tu pareja?

6.  ¿Sueles ocultar información para no tener que dar explicaciones a tu pareja, padres o amigos?

7.  ¿Mientes para evitar que te cuestionen la realidad?

8.  ¿Te cuesta tomar decisiones aunque parezcan muy simples?

9.  ¿Crees que no puedes hacer nada bien?

10. ¿Dudas de si eres una buena/o esposa/o, novia/o, hija/o, amiga/o o empleada/o?

Las personas que practican el gastlighting suelen mentir constantemente, intentarán trasladarte sus inseguridades y lo negarán todo. Suelen ser “encantadores de serpientes” que se manejan muy bien en las lides de la persuasión. Son manipuladores natos que pueden causar un gran dolor a sus víctimas.